Primero fueron los peces fluorescentes, en 2003, luego los cerdos fluorescentes en 2006, luego unos gatos, siguieron y crearon un perro, conejos, ratones, monos, insectos, etc, todos ellos animales transgénicos. OGM, han sido Modificados genéticamente para que nazcan con la piel y los órganos fluorescentes y muestran un colores brillantes cuando se les mira con luz ultravioleta.
Para lograr este efecto se utiliza una proteína que provoca una fluorescencia en todo su organismo, piel, pelo, músculos, cerebro, corazón, hígado, riñón, páncreas, pulmones, estómago, intestinos, lengua e incluso en sus excrementos.
Pese a lo espeluznante y poco útil, que resulta el experimento, los autores nos aseguran que esta técnica podría servir en el futuro para producir gatos clonados con los que estudiar varias enfermedades que afectan a las personas, ya que gatos comparten gran parte de su mapa genético con los humanos. De hecho, son más parecidos a nosotros que los roedores que suelen usarse en los laboratorios.
Regulación de animales modificados genéticamente para la alimentación humana
Regulación de animales modificados genéticamente para la alimentación humana
Fuentes. Novaciencia, Elmundo, Blogextremo, Hivennews