Por la noche es cuando somos más vulnerables a las radiaciones electromagnéticas porque el cuerpo tiene las defensas bajas (el sistema inmunológico está desactivado), ya que está realizando labores de reparación.
El sueño está relacionado con el sistema inmunológico. Si no duermes bien tu sistema inmunológico será mucho menos efectivo en su lucha contra la enfermedad. Tendrás menos energía, menos motivación y es más probable que estés irritable. El sueño es una de las funciones básicas del ser humano y las consecuencias de padecer un sistema de dormir desequilibrado son graves.
Uno de los efectos perniciosos de la contaminación electromagnética es que inhibe la producción de la hormona melatonina, denominada hormona de la oscuridad, dado que sólo se produce durante la noche mientras dormimos. La melatonina es uno de los antioxidantes más poderosos que se conocen, y juega un papel fundamental en la prevención de numerosos cánceres, puesto que evita mutaciones en el material genético.
Estudios realizados concluyen que las personas invidentes, al tener niveles más elevados de melatonina, tienen un riesgo menor de contraer cáncer.
Se puede incrementar la producción de melatonina de forma natural exponiéndose a la luz del sol durante el día y a una absoluta oscuridad durante la noche. Se deben usar cortinas o persianas que no dejen pasar la luz del exterior. El nivel de oscuridad debe ser tal que no veamos nuestra mano si la colocamos delante de la cara.
Científicos británicos han sugerido que el incremento en la incidencia de leucemia infantil puede deberse a la exposición nocturna a la luz. El electrosmog provoca una pérdida de sincronización de los biorritmos. Los llamados 'genes reloj' se descubrieron hace sólo 5 años. Anomalías en su funcionamiento pueden provocar que las células no respondan a las señales que interrumpen la división celular o las que indican a las células anormales que se destruyan (apostosis).
Reducir al minimo las radiaciones electromagnéticas del dormitorio durante la noche.
El informe del biofísico neozelandés Neil Sherry (Junio 2000), realizada a petición del Parlamento Europeo, concluye "la radiación electromagnética de baja frecuencia, como la emitida por los teléfonos móviles, es perjudicial para el cerebro, corazón, feto, hormonas y células. A través de resonancias con los cuerpos y las células, la radiación interfiere en la comunicación intercelular, su crecimiento y regulación, dañando la base genética de la vida".
Aunque lo principal es minimizar en todo lo posible la exposición a los campo electromagnético (CEM), se cree que hoy en día resulta imprescindible llevar siempre encima algún tipo de protección.
Información sobre los campos electromagneticos
Campos electromagnéticos y salud pública
Campos electromagneticos y el cáncer
Preguntas y respuestas
Fuente. Mónica Gómez, terapeuta holística